Posicionamiento del Colegio sobre los informes del Ministerio de Sanidad sobre la situación de la profesión

Valoración de la Junta de Gobierno de los informes emitidos por el Ministerio de Sanidad ayer, lunes 13 de enero, sobre la situación laboral de las enfermeras.

Desde el Colegio Oficial de Enfermería de Zaragoza, queremos poner en valor la publicación de ayer, 13 de diciembre, de sendos informes sobre la situación de la Enfermería de España por el Ministerio de Sanidad.

Dichos informes que llevan por títulos “Situación actual y estimación de la necesidad de enfermeras en España 2024” y “Situación laboral y necesidades percibidas por las enfermeras en España” son una clara constatación de la cruda realidad en la que vive la profesión.

La enfermería española, y la aragonesa por descontado, vive con un déficit de profesionales que sitúa a España muy por debajo de las ratios europeas, con la necesidad urgente de 100.000 enfermeras adicionales. Este dato refleja la importancia de reforzar la enfermería como pilar esencial del sistema sanitario.

Si nos centramos en el plano local, desde la Organización colegial valoramos positivamente los esfuerzos realizados el Departamento de Sanidad en el desarrollo de especialidades y en las ofertas públicas de empleado llevadas a cabo en los últimos años que ha permitido mejorar las plantillas. Pero, desgraciadamente, no es suficiente.

Aragón tiene una ratio de 7,27 enfermeras/1.000 habitantes. Para ajustarnos a valores europeos deberíamos tener entre 1.514 enfermeras más (para igualarnos a Eurostat) hasta 2.381 enfermeras más (para cumplir con la media de la OCDE). Tal como ha sido hasta el crecimiento de las plantillas desde 2018, según el informe ministerial Aragón tardará entre 10 y 16 años en alcanzar las ratios europeas.

Nuestra Comunidad arrojó en 2023 un saldo negativo de 465 enfermeras perdidas hacia otras Comunidades Autónomas y países. Un dato que ha empeorado respecto a 2021 cuando la cifra fue de 286.

A eso hay que sumar los datos arrojados por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) que muestran un saldo negativo en el origen de las enfermeras contratadas en nuestra Comunidad. En 2023 se firmaron 782 contratos en Aragón con enfermeras de otras CCAA, mientras que 220 fueron de enfermeras formadas en nuestros centros académicos.

Por tanto, existe un enorme déficit y nuestra dependencia del capital humano de otras zonas de España nos hace vulnerables ante la enorme competitividad en la actual “guerra de nóminas” existente entre los diferentes Servicios de Salud para atraer y retener más empleadas.

Algo en lo que Aragón no está en una situación de ventaja. Según el informe solo ofrecemos mejores salarios brutos mensuales medios que Galicia, Madrid, La Rioja o Cantabria. Aragón paga de media a una profesional enfermera de AP 2.091 euros brutos/mes frente a los 2.917 de nuestros vecinos navarros o los 2.368 euros brutos/mes de Cataluña. Y si hablamos del ámbito hospitalario, la cifra sube a 2.253 euros brutos/mes.

En el caso de las enfermeras especialistas el incremento respecto a sus compañeras generalistas apenas supone un incremento de 60 euros brutos. Situación esta que se vuelve endémica en toda la geografía nacional salvo en contadas excepciones como Canarias o Andalucía. 

El informe también resalta que un 40% de las enfermeras en España se plantean abandonar la profesión en los próximos 10 años debido a factores como la falta de reconocimiento económico, la sobrecarga laboral y el déficit de personal. Estos datos refuerzan de forma contundente la necesidad de implementar medidas urgentes que aseguren condiciones laborales dignas, incentivos profesionales y una adecuada dotación de recursos.

No todas las preocupaciones de la profesión tienen una solución económica. El informe de situación laboral elaborado a partir de los datos recogidos de 55.000 enfermeras también arroja otros datos significativos en dónde se debería actuar.

El 71,4 % de las encuestadas han manifestado como prioritario el desarrollo de un modelo de competencias con un itinerario formativo homogéneo en todo el Sistema Nacional de Salud.

Casi el 70% (69,3%) creen que lo importante ahora es establecer de un modelo de Enfermería de Práctica Avanzada o dar más liderazgo a las enfermeras y la promoción la práctica clínica basada en la evidencia (57% en ambos casos).

Ante esta situación de enorme cansancio y frustración, las profesionales ya no se conforman con buenas palabras y promesas. Si realmente el Ministerio entiende que la figura de la enfermera es tan relevante dentro del Sistema Nacional de Salud debe llevar a cabo acciones reales y gestos objetivos para que las enfermeras quieran seguir trabajando en España.

Por ello, lo que urge es el reconocimiento profesional del A1 y la incorporación de la enfermera en la Ley del Medicamento.

Por tanto, es fundamental abordar de manera prioritaria estas medidas que garanticen una atención de calidad de los usuarios sin olvidar que cuidar a nuestras profesionales y retener su vocación y talento es algo primordial.

Las enfermeras zaragozanas y aragonesas estamos plenamente comprometidas a liderar y apoyar iniciativas que, no solo reconozcan y valoren el papel esencial de las enfermeras, sino que también contribuyan a la sostenibilidad y mejora del sistema sanitario para beneficio de toda la ciudadanía aragonesa y española.

Desde el Colegio de Enfermería de Zaragoza se reitera la disposición de colaborar con el Departamento de Sanidad y el Servicio Aragonés de Salud en la búsqueda de soluciones.